La silueta de este Toro es uno de los elementos del paisaje español que más sorprenden y llaman la atención, sobretodo a los extranjeros que nos visitan. El caso del Toro de Osborne es una curiosidad de nuestro país, esta imagen fue primeramente un reclamo publicitario y por su fuerza e impacto, casi por decisión popular, pasó a ser parte del Patrimonio Cultural de España, con un valor añadido más allá de su función publicitaria.
La historia del Toro de Osborne se remonta a los años 50 cuando la conocida marca de brandy realizó la campaña de su producto. Comenzaron con 4 siluetas de toros, diseño del pintor y dibujante Manuel Prieto, de Cádiz. Hoy en día hay 90 toros dispersos por el país. Y algunos más fuera de España.
Retomando la historia de este icono, las primeras vallas de toros son de 1958. Al principio eran de madera, después por los deterioros que causaba el clima en la intemperie -sol, lluvia y viento-, se comenzaron a fabricar con una estructura metálica. Los primeros toros eran también más pequeños, de 4 metros de altura. En 1962 se pasan a construir de 14 metros de altura, es la medida que vemos hoy de los toros que actualmente están dispersos por la geografía de España.
En 1994 ocurrió algo importante en la vida del toro de Osborne, se cambia el reglamento de carreteras que incluía la eliminación de todos los toros, provocando fuertes reacciones en la sociedad. La primera institución en reaccionar fue la Junta de Andalucía que pide se catalogue a los toros como bien cultural y el Gobierno de Navarra aprueba una Ley Foral para mantenerlo en sus carreteras. El mismo año el Congreso de los Diputados declara al Toro de Osborne Patrimonio cultural y artístico de los pueblos de España. En consecuencia, en 1997 el Tribunal Supremo dicta sentencia a favor de mantener al Toro de Osborne en las carreteras por el interés estético y cultural que suscita.
Paralelamente, durante esos años, se producen reclamaciones populares. El toro de Osborne ha calado tanto en la sociedad que su silueta se encuentra ya no sólo en las carreteras, sino que hay pegatinas con la silueta del toro, aparece en portadas de revistas, en la prensa y en otros productos de consumo: postales, camisetas, gorras, llaveros, pegatinas de coche, etc. Incluso apareció en el cartel de la película de Bigas Luna, Jamón Jamón del año 1993. También se ha utilizado como símbolo político y para reclamar derechos y libertades, desde sus orígenes hasta hoy, vinculado a todo tipo de temas sociales y de actualidad. Hoy es habitual ver fotos del Toro de Osborne que suben los viajeros desde sus cámaras a las redes sociales.
La estructura de los toros Osborne consta de tres partes: los cuernos, el cuerpo y el rabo. Los cuernos cuentan con un refuerzo especial para soportar el viento, el cuerpo está anclado a la estructura metálica de acero y el rabo se sujeta al suelo con cable de acero tensado para evitar que se mueva. La orejas y los testículos del toro también van con un refuerzo similar al de los cuernos. Las piezas van unidas con tornillos de doble tuerca, y van siempre pintados: cada vez que se pinta por completo uno de estos toros, se usan unos 50 kilos de pintura.
Los 90 toros que hoy existen están situados en diferentes carreteras. Por lo general, se han elegido altos de colinas para que la figura se aprecie mejor con la visión del horizonte o de extensos paisajes donde encaja su silueta. Os contamos algunos sitios donde verlo.
Andalucía es la comunidad con más número de Toros en sus carreteras, hay 23. Este está en la carretera que une Cádiz y Sevilla y es uno de los 10 que hay en Cádiz, lugar donde está la destilería de la marca originaria del Toro. Cómo anécdota contaros que este mismo año se ha usado la imagen del Toro de Osborne como portada de la Feria de la Primavera y del Vino Fino de 2015, en Sevilla, en Las Banderas. Se instaló un toro de 24 metros de altura y se ha aunuciado que ese toro será la portada de la Feria de El Puerto los próximos 2 años.
En Cádiz hay otros toros Osborne en el Puerto de Santa María, en la cuesta de la Trocha y otro en Matajaca y otro se localiza más al sur, en la E-5 a la altura de Conil. El de Algeciras está en Los Barrios. En la carretera que une Sevilla y Córdoba E-5 se encuentra el Toro en La Campana y en las afueras de la ciudad cordobesa hay uno más.
Toro en la carretera Cádiz – Sevilla. Africa Mayi Reyes (CC BY-ND 2.0)
En Castilla la Mancha hay 13 toros. El de la imagen que hay arriba se sitúa cerca de Guadalajara, a la altura del pueblo de Gajanejos y se ve muy bien desde la Autovía A-2 y cerca de la misma ciudad de Guadalajara hay otro en la carretera nacional N-320. Más adelante en la E-90, están los toros de Medinacelli y de Torremocha del Campo, cerca de Sigüenza.
Hacia el sur, cerca de Consuegra, la localidad famosa por sus molinos de viento, hay otro Toro que se ve desde la E 5. En esta misma carretera, dirección Ocaña se puede ver el Toro de Osborne que está próximo a Tembleque.
Toro en la A2 Guadalajara. Marco Chiesa (CC BY-ND 2.0)
Castilla y León cuenta con 14 toros, nada más y nada menos. Este de la imagen está en Fresno de la Fuente, Segovia. Se encuentra situado junto a la Autovía A-1, en el kilómetro 123. Como se puede apreciar, el toro gusta hasta a los rebaños de ovejas, que seguro encuentran algo de sombra los días calurosos en la soleada Castilla.
En Segovia también se encuentra el toro de Labajos, en dirección a Tordesillas desde Madrid por la A-6. Por el otro lado, volviendo a la A 1, pasando Aranda de Duero, dirección Burgos, hay otro visible desde la misma autoría a la altura de Gumiel de Hizán. El siguiente toro que se ve desde la Autovía del Norte se sitúa en Cogollos. Uno de los más visibles está en la carretera de Burgos A-1, en los alrededores de Lerma. Otro de los toros que se pueden ver en esta comunidad está en Brazuelo, localidad cercana a Astorga, en León. Además está el popular toro de Rivavellosa, también en la A-1, en Burgos, en la localidad de Miranda de Ebro.
Toro en Fresno de la Fuente, Segovia. Rubén Díaz Caviedes (CC BY-ND 2.0)
Asturias tiene 5 toros por sus carreteras. Uno es este, que se localiza en La Barreda, en la carretera N-634 P.K. 196. Hay otro que se ve muy bien desde la autovía del Cantábrico a la altura de Llanes en la E-70. En Avilés está el Toro Osborne de Carreño en la A-8. Cerca de Oviedo están los de Santa María de Piedramuelle y Grado que se localizan cerca de la A-63, en la N-634.
Toro Osborne en La Barreda, Asturias jlmaral (CC BY-ND 2.0)
En tierras gallegas se pueden ver hasta 5 toros de Osborne. El de Betanzos es uno de los que más fácilmente se observa. Está en la carretera N-VI. Otro es el Toro Osborne de Becerreá, que se ve desde la A 6, cerca de Lugo. Camino a Vigo se contempla el Toro Osborne de A Cañiza, está en la N 559. Cerca de Pontevedra está el Toro Osborne Puentesampaio en la N-550.
Toro en Betanzos. Mercedes Blanco (CC BY-ND 2.0)
Valencia es otra de las comunidades con más toros, tiene 11 toros dispersos en varios puntos de su geografía y cuenta con un añadido, una excepción, el Toro que está en la Universidad Politécnica de Valencia, que ha pasado de ser un icono de la carretera a convertirse un icono de la facultad para los estudiantes. ¿Cómo ha llegado allí? Debemos recordar la historia del toro de Osborne: en los años que peligraba su “extinción” y cuando comenzaron a desaparecer de los caminos, la Universitat Politècnica de València decidió adoptar un Toro Osborne. Se puede ver en la Avenida de los Naranjos, en los jardines de esta Universidad y lo cierto es que sorprende ver su tamaño de tan cerca.
Otros son el Toro Osborne en de Taverna de Valldigna, en la carretera E-15 camino a Gandía. En Alicante están además el de Villajoyosa, cerca de Benidorm, y los de El Campello en la AP-7, en el acceso a AP-7 desde la carretera N-332; en Torrellano-El Altet, en el desvío de la carretera N-332 que va al Aeropuerto Internacional de Alicante, se suele ver si se llega a Alicante en avión. Además están los de Salinas de Santa Pola, en la N-332, el de Elche que se ubica en la A-7, en un alto sobre la N-340. El de Monforte del Cid, cercano al Campo de Golf Alenda, en la A-31 y el de Monforte del Cid-Orito, en el puerto del Portichol, en la A-31.
Toro Osborne en la Politécnica Ferbr1 (CC BY-SA 3.0), via Wikimedia Commons
Las tierras de Extremadura albergan 5 toros. Uno de los más lucidos está al Sur de Trujillo, en la N-V. Si visitan Mérida también se ve otro toro en esta ciudad. Está en la E-90. Hay un toro que se ve muy bien desde el tren a la altura de Casar de Cáceres.
Toro de Osborne al sur de Trujillo, Extremadura
Madrid cuenta con 2 toros de Osborne. Como curiosidad, en 1957 se colocó el primero en Cabanillas de la Sierra, Madrid. Estaba en el kilómetro 55 De la N-1, era de madera y medía 4 metros de altura. Después de 50 años en 2008 se colocó un nuevo Toro de Osborne para recordarlo, que ahora se ve desde la A-1. Es el de la imagen. Este toro sirve de punto de localización del comienzo de la Ruta del Toro que hay en Cabanillas, pudiendo ser un paseo de 5 o de 8 kilómetros, según el recorrido que se elija, pero en ambos casos, se toma al toro de Osborne como referencia para el comienzo.
El segundo es el Toro de Valdemoro, que está sobre el cerro al sur de Madrid al comienzo de la carretera de Andalucía, en el kilómetro 28. Se ve muy bien también desde el tren y es otro ejemplar de los más antiguos.
Toro Osborne al Atardecer (sin localizar) Raúl hernández González (CC BY-SA 2.0 )
En Aragón se cuentan hasta 6 toros. Uno se ve desde la carretera que va a Zaragoza a la altura de Pina de Ebro, en la N-II, en el kilómetro 365. Más adelante está el de Alfajarin, que se ve desde la E-90. Se ve otro en en la carretera de Barcelona A-2, cerca de Zaragoza, cuando pasas por un sitio que se llama La Muela, y se localiza en el kilómetro 295 de la Carretera N-II.
Otro Toro Osborne aragonés, el más famoso de esta comunidad y el más cinematofráfico, está en Peñalba, Huesca. A sus pies fue donde se filmó la escena de la película “Jamón Jamón” en la que aparecían Penélope Cruz y Javier Bardém. Está en la carretera N-II Km. 402
Campo de cultivo con Toro Osborne
La Rioja tiene 2 toros: uno está cerca de Briones, que vemos en la imagen. Yace a lado de campos de vides de la famosa zona vitivinícola, es el Toro Osborne de San Asencio, Logroño N-232, P.K. 436; y el otro está en Navarrete, Logroño, en la ruta del Camino de Santiago. Se encuentra exactamente en el cruce de la carretera N-232, P.K. 416.
Toro Osborne de San Asencio, vista desde Briones, Logroño
Los Toros de Osborne se ven prácticamente sin buscarlos, cuando se recorre un poco el país, si bien, es más fácil verlos en Andalucía, Valencia y Castilla. Si alguien está interesado en ver alguno en concreto, hay un mapa que localiza todos los toros de la marca Osborne: está en googlemap .
Para ver bien los toros por la geografía española, es mejor desplazarse en tren o por carretera, aunque hay que decir que el Toro de Osborne es más útil de lo que pueda parecer a priori. Por ejemplo el de Jerez de la Frontera, sirve de señal visual para los pilotos y marca el punto donde activar el tren de aterrizaje de los vuelos que llegan al aeropuerto de Jerez.
Viajando en tren se puede ver en los trayectos que van desde Madrid a Sevilla, Barcelona, Zaragoza, Irún etc.; también se ven en viajando por carretera en autobús. Para cualquiera de estos recorridos se puede usar este comparador multitransporte donde también aparecen billetes de tren y autobús. Las Bodegas del grupo Osborne, promotores de este icono, se pueden visitar en Puerto De Santa María (Cádiz), Malpica del Tajo en Toledo y en La Rioja.